Director de FESIT expuso en segunda jornada de los diálogos tributarios convocados por el Gobierno

Director de FESIT expuso en segunda jornada de los diálogos tributarios convocados por el Gobierno

La presentación estuvo centrada en cinco temas: Un sistema tributario justo y competitivo, los desafíos de la desintegración del sistema, aplicación de un impuesto al patrimonio, cambios al impuesto global complementario y propuestas en materia de IVA.

Mayo 10 de 2022.- El pasado 27 de abril representantes del Centro de Estudios Tributarios, entre ellos su director Gonzalo Polanco, asistieron a la segunda jornada de diálogos tributarios lanzados por el gobierno el 19 de abril. El contenido que se discuta en estos diálogos sociales se transformarán en un insumo para el diseño de la próxima reforma tributaria.

Al encuentro, que se realizó en dependencias de la Casa Central de la Universidad de Chile, junto al profesor Polanco asistieron más de 10 expositores expertos en materia tributaria, entre ellos el ex director del Servicio de Impuestos Internos, Michel Jorrat, la economista senior de Libertad y Desarrollo, Macarena García; los socios de impuestos de Deloitte, Hugo Hurtado y Ximena Niño; el académico de la Universidad Adolfo Ibáñez, Claudio Agostini; del foro Desarrollo Justo y Sustentable, Alfredo Ugarte y Álvaro Gallegos; y del del estudio Sapag y González asociados, Sergio Sapag y Bernardo Marchant.

La presentación del CET se centró en cinco temas: Un sistema tributario justo y competitivo, los desafíos de desintegrar el sistema, impuesto al patrimonio, cambios al impuesto global complementario y propuestas en materia de IVA.

El profesor Polanco señala que la importancia de abordar estos temas radica en que “usualmente los proyectos de reforma tributaria se presentaban al Congreso sin antes haber escuchado a especialistas en la materia. Solo interveníamos cuando algún parlamentario nos solicitaba aclarar algún punto. En cambio, se ha señalado que las discusiones sostenidas en estos diálogos serán insumos para el proyecto de ley, lo que me parece cambia el paradigma sobre la forma de encarar estos temas”.

Respecto al primer punto, en la presentación del CET, se detalla que un sistema tributario justo y competitivo, debiera poder contener los siguientes puntos: identificar y gravar a aquellos contribuyentes que poseen la mayor capacidad contributiva (en términos sustantivos y de obligaciones accesorias), respetando principios de equidad horizontal y vertical; eliminar complejidades que faciliten el arbitraje, especialmente en el caso de actores más sofisticados; cerrar espacios de evasión y elusión; permitir el nacimiento y desarrollo de actividades económicas; y mantenerse estable en el tiempo.

Sobre los desafíos de desintegrar el sistema, se explica que debe existir un estatuto diferenciado para pymes, con o sin opción de transparencia; así como también considerar otros factores que sean distintos a los ingresos. “Un parámetro podría ser la aplicación de una tasa progresiva en régimen general”, dice.

Al mismo tiempo, señala que se debe revisar la base del impuesto y la tasa aplicada debe estar en línea con la carga tributaria esperada. También, se menciona que es preciso preguntarse si es necesario eliminar el concepto de utilidad tributaria; ver si se incluye o no en la base del impuesto global complementario; eliminar las devoluciones de crédito por impuesto de primera categoría; analizar la carga en los tratados, así como su impacto y riesgos asociados.

La desintegración del sistema tributario “implica revisar otros aspectos de la tributación a nivel de empresas, como la consolidación fiscal, uso de pérdidas grupales, y el tratamiento de operaciones entre entidades que consolidan localmente”, se añade.

En relación al impuesto al patrimonio, se indica que el foco debe estar puesto en que “el costo de cumplimiento no termine siendo similar al impuesto, (obligación de realizar valorizaciones de cargo del contribuyente). Además, se debe examinar la relación con el impuesto a la herencia y otras cargas patrimoniales. Y, en el caso de los bienes y raíces, eliminar el impuesto al patrimonio y herencia, algunas exenciones tributarias, contribuciones y sobretasa.

Respecto a las modificaciones al impuesto global complementario, se señala que es necesario reestructurar los tramos y tasas de este impuesto, de acuerdo a ciertos periodos de tiempo y de manera transitoria. Y, para el caso de las propuestas en materia de IVA, se explica que los países buscan enfrentar la regresividad del IVA, aplicando dos medidas: IVA universal, que se traduce en una rebaja de la tasa o exención a ciertos bienes y servicios; e IVA personalizado.

Por lo mismo, se agrega que nuestro país podría implementar la segunda opción. “Chile puede transitar hacia la devolución del IVA pagado por sectores de menores recursos en bienes y servicios de primera necesidad. El sistema podría ser implementado, partiendo de un IVA “presunto” e introduciendo incentivos para informar el IVA efectivamente pagado”, se subraya.

Además de ello, se concluye que este sistema permitiría incorporar incentivos a la digitalización y a la formalización del pago de impuesto.


Noticia escrita por: Departamento Control de Gestión y Sistemas de Información, Facultad de Economía y Negocios, Universidad de Chile